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viernes, 4 de junio de 2010

Trabajo, explotación

Hay trabajo y recursos para todos, solo tenemos que saber como repartir, y dar a cada uno lo que le corresponde. Los intereses egoístas son los que entorpecen a las buenas ideas, para poder cambiar el mundo, de forma que ganemos todos y no perdamos ninguno. Esto sucede porque algunos se creen mejores que otros y es verdad, pero por esto no puedes negar los derechos fundamentales a la parte de la humanidad que es menos brillante. Los horarios interminables en los trabajos, son gastos innecesarios en las empresas, con una baja rentabilidad. El ser humano no puede rendir adecuadamente si trabaja más horas de lo debido. Todo tiene su tiempo, y si repartimos el trabajo todo sera más fácil para todos. Según las aptitudes de una persona, es más o menos necesaria para una empresa, así como el rendimiento si es físico o mental. No se puede exigir las mismas horas a un trabajo físico que a un trabajo mental. El deterioro en el trabajo físico es total, mientras que el mental no solo conserva a la persona en perfecto estado, sino que mejora su estado mental. En cambio está mejor remunerado, el trabajo mental por que es el que tiene el poder. Quien trabaja con sus manos es siempre el explotado. El que trabaja en la oficina no le importa echar horas, el que trabaja en una obra le cuesta la vida. Imágenes de Google

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