Un cuento hecho realidad

Nos gusta hacer de los cuentos que más nos gustan una realidad, soñar no está mal, se crean cosas nuevas, y formamos mundos idílicos aunque a veces un tanto inútiles. Pero la ostentación y el lujo nos llaman, nos sentimos seres especiales sin en realidad serlo. Nos engañamos rodeándonos de los mejores manjares y lugares, y después cuando volvemos a la realidad queda el gran vacío. Nos hemos creído el cuento, pero en realidad ni somos nadie, ni el cuento nos quito ese problema, que te angustia, porque el cuento que necesitas, es tu propia vida arreglada, perfumada, y acomodada a gusto de tu persona y no al gusto de los demás. Imágenes vía web.